Caída de pelo o alopecia: tipos

Caída de pelo o alopecia: tipos

El pelo tiene funciones de protección, termorregulación, pero sobre todo estéticas y sociales. Lo eliminamos de algunas zonas y en otras su caída provoca angustia y alteración de la imagen corporal.

Se renueva continuamente. Normalmente se caen unos 100 cabellos del cuero cabelludo al día.

Se recomienda consultar al médico si notamos falta de pelo o menor densidad.

Alopecia: pérdida anormal del pelo de la cabeza o de otras zonas corporales (pestañas, cejas, barba, región genital…). Puede ser localizada, difusa o total.

 

TIPOS DE ALOPECIA
NO CICATRICIALES

Potencialmente recuperables. Las más frecuentes son:

  • Alopecia androgénetica o calvicie común: pérdida lenta de cabello por factores genéticos y hormonales (andrógenos) con miniaturización progresiva de los folículos pilosos hasta desaparecer. Más frecuente en hombres (entradas y coronilla). En las mujeres pérdida más difusa, manteniendo la zona frontal.
    • Tratamiento en fases previas: minoxidil (vasodilatador tópico/ oral), Finasteride/Dutasteride (inhibidores de la cinco-alfa-reductasa), anticonceptivo en mujeres, biotina… 
  • Efluvio anágeno: falta de cabello por enfermedades (hipotiroidismo, lupus, neoplasias, anemia, desnutrición…), fármacos (quimioterapia…), tóxicos, traumas (peinados muy tirantes, calor…), arrancamiento (tricotilomania), etc.
  • Efluvio telogéno: caída excesiva de pelo tras enfermedades (infecciones, cirugía…). Postparto, fármacos (litio, ciclosporina, supresión de anticonceptivos…), estrés, depresión, pérdidas importantes de peso, estacional (otoño), etc.
    • Afecta principalmente a mujeres.
    • Tratamientos: control de la causa, suplementos vitamínicos, hierro…
  • Alopecia areata: pérdida de pelo en placas redondeadas, con piel normal en la cabeza o en la barba, a veces puede ser total (todo el cuero cabelludo) o universal (todos los pelos del cuerpo). El sistema inmune del paciente ataca al folículo (tras disgustos, estrés, infecciones…).
    • Se da en hombres, mujeres y niños. Puede remitir espontáneamente, pero provoca ansiedad y unos pocos pacientes presentan formas extensas y crónicas.
    • Tratamientos: Minoxidil, corticoides tópicos e intralesionales En casos más extensos inmunosupresores orales, agentes irritantes en la zona afectada…
CICATRICIALES

Son irreversibles. La piel está roja o fina y brillante. Hay destrucción del folículo piloso por causas genéticas, enfermedades (lupus eritematoso cutáneo, liquen plano pilar, infecciones…) medicamentos, traumatismos, quemaduras profundas, radiaciones etc.

  • Alopecia frontal fibrosante: pérdida gradual en zona frontal (el cabello está cada vez más atrás). Afecta principalmente a mujeres en la menopausia.

Es importante detectar precozmente las causas de la alopecia e instaurar el tratamiento más adecuado.

Los cosméticos (champús, ampollas…) pueden mejorar el aspecto del pelo, pero no detienen su caída. Se recomienda desconfiar de productos milagro.

Existen tratamientos estéticos para disimular la alopecia localizada: maquillaje capilar (fibras de queratina), micropigmentación… En calvicie más avanzada: gorra, pañuelos, prótesis (pelucas, postizos…), cirugía (injertos capilares)…

 

Mº Pilar Hernández Orta
Enfermera de Dermatología. Hospital Reina Sofía de Tudela.
Máster en Deterioro de la Integridad Cutánea y Cuidado de la Piel. Universidad Católica San Vicente Mártir de Valencia (UCV).

 

Fuentes

Higiene y cuidado de las manos

Higiene y cuidado de las manos

La higiene de las manos es esencial para garantizar su limpieza y reducir la transmisión de enfermedades, entre ellas el coronavirus.  Pero el exceso de lavados, el uso de productos irritantes, un secado inadecuado, factores individuales… pueden provocar la aparición de eccemas y dermatitis en las manos, haciéndolas más vulnerables a la entrada de infecciones.

Las recomendaciones del lavado frecuente deben ir unidas al consejo de un buen cuidado de las manos, que implica acciones para disminuir el riesgo de irritación y deterioro de la piel.

 Proteger las manos con guantes adecuados para:

  • Resguardarse del frío.
  • Utilizar productos irritantes o sensibilizantes (detergentes, lejías, polvo, cartón,  tintes, disolventes…).
  • Evitar roces y daños en trabajo y aficiones.
  • Manipular alimentos, sobre todo ajo, cebolla, tomate, patatas, naranjas, limones… (son irritantes).
  • Evitar la humedad excesiva (fregar, limpiezas…). No llevarlos mucho tiempo, Cambiarlos si nota las manos húmedas.

No tocarse la cara con los guantes puestos. Retirarlos de manera adecuada.

El uso de guantes no sustituye al lavado de manos.

 

 ¿CUÁNDO HAY QUE LAVARSE LAS MANOS?
  • Siempre que estén visiblemente sucias.
  • Después de ir al baño, estornudar, toser o sonarse la nariz.
  • Tras estar con enfermos, tocar animales, productos tóxicos, objetos que pueden estar contaminados (dinero, interruptores, envases, alimentos, carnes crudas…).
  • Para tocar a los bebes, atender enfermos y curar heridas.
  • Para preparar alimentos, comer, tocarse la cara, los ojos
  • Antes de ponerse guantes y después de quitárselos.

 

¿CÓMO LAVARSE LAS MANOS?

Siempre que sea posible, el lavado se hará con agua y jabón suave.

En su defecto, en algunas profesiones, si nuestras manos están dañadas y no se encuentran sucias, podemos limpiarlas con geles o soluciones hidroalcohólicas, frotándolas por todas las zonas hasta absorber el producto

  • Retirar objetos: anillos, pulseras, relojes…
  • Llevar las uñas cortas y cuidadas.
  • Mojar las manos con agua tibia (ni caliente, ni muy fría).
  • Aplicar una cantidad adecuada de jabón suave (pH neutro, syndet,  hipoalergénicos…)
  • Frotar unos 30 segundos: palmas,  dorso, entre  los dedos (incluidos los pulgares), uñas, pulpejos (espacio entre índice y pulgar) y muñecas.
  • Aclarar  con agua todo el jabón.
  • Secar bien sin frotar (a toquecitos) todas las zonas, con una toalla limpia.
  • Aplicar cremas hidratantes o protectoras después de cada lavado y siempre antes de acostarse.

La dermatitis de manos puede ocasionar: picor, escozor, pequeñas ampollitas, enrojecimiento, fisuras, zonas engrosadas o secas… Precisará de la aplicación de tratamiento tópicos con  corticoides o inmunomoduladores y, en ocasiones, la valoración  por Dermatología para descartar sensibilizaciones u otros tratamientos.

 

Mº Pilar Hernández Orta
Enfermera de Dermatología. Hospital Reina Sofía de Tudela.
Máster en Deterioro de la Integridad Cutánea y Cuidado de la Piel. Universidad Católica San Vicente Mártir de Valencia (UCV).

 

Fuentes

 

Imagen de ivabalk en Pixabay

Dermatitis atópica: ¿cómo controlarla?

Dermatitis atópica: ¿cómo controlarla?

La dermatitis atópica es una enfermedad inflamatoria crónica de la piel que se produce en brotes.

Es muy frecuente en la infancia, pero puede aparecer a cualquier edad, en diferentes localizaciones. Se desencadena por factores genéticos, inmunológicos, ambientales…

Está caracteriza por piel seca y sensible, placas de eccemas y picor intenso que puede alterar el sueño y la calidad de vida de los pacientes y sus familias.

 

CUIDADOS PREVENTIVOS

Su control precisa un tratamiento adecuado en los brotes y cuidados preventivos continuos:

  • Usar ropa y calcetines de algodón o hilo. Evitar lana, fibra, prendas muy ajustadas… No abrigarse mucho.
  • Aclarar bien la ropa. No usar suavizantes.
  • Calzado de cuero o tela, bien aireado (usar deportivas poco tiempo).
  • Temperatura de la habitación suave, no calurosa. En invierno, conviene poner humidificadores en  radiadores o toallas húmedas…
  • Retirar objetos que retengan polvo (peluches, alfombras…).
  • No rascarse. Alternativas: antihistamínicos, cremas, frío, ambiente tranquilo, distracción, abanicar, agua termal, masaje, guantes por la noche, pijama de algodón húmedo…
  • Uñas cortas y limpias para evitar heridas y sobreinfecciones.
  • Ducha o baños cortos. No más de una vez al día, con agua tibia, no caliente, y productos adecuados para pieles atópicas (syndet, avena, aceites de baño…) sin detergentes, ni perfumes, ni conservantes. No usar esponjas. Secar sin frotar con toquecitos. Hidratar siempre después.
  • El cloro de las piscinas (especialmente las cubiertas) irrita la piel atópica. Antes del baño conviene aplicar cremas barrera y al salir, ducharse para eliminar el cloro e hidratarse después.
  • Van bien la exposición moderada a la luz solar y los baños de agua de mar.
  • Hidratar todos los días la piel al menos una vez con cremas emolientes: hidratan, aportan grasa y evitan la pérdida de agua, restauran la función barrera de la piel y reducen el picor.

 

TRATAMIENTOS

En las zonas de eccema, no debe darse hidratantes (escuecen). Se recomienda aplicar tratamiento:

  • Corticoides tópicos: dosis y tiempo indicado mientras haya lesiones.
  • Inmuno-moduladores tópicos (Pimecrolimus y Tacrolimus): complemento/alternativa de los corticoides. Menos efectos adversos, se pueden usar de mantenimiento.
  • Antibiótico si existe sobreinfección.
  • Antihistaminicos orales si hay picor.
  • Tratamientos sistémicos en casos severos: fototerapia, inmunosupresores, medicamentos biológicos…

 

La enfermera ofertará cuidados adaptados a las necesidades de cada paciente

 

Mº Pilar Hernández Orta
Enfermera de Dermatología. Hospital Reina Sofía de Tudela.

 

Fuentes:

  • Muñoz Mañas V., Fornes Pujalte B., Lucha Fernández V., Palomar Llatas F.,  Dermatitis atopica (DA): hidratación y plan de cuidados. Enfermería Dermatológica  nº 1 · mayo-junio 2007. Pag 16-23.
  • Asociación Española de Familiares y Pacientes de Dermatitis Atópica (ADEA). Conocer la Dermatitis Atópica. Principios generales del cuidado de la piel con dermatitis atópica. Adeaweb.org [Sede Web]. 2014. [Consultado el 26/11/2014]. Disponible en: www.adeaweb.org./02sabermas/conocerlada/cuidadopiel/index.htm
Verrugas genitales: prevención, tratamiento y cuidados

Verrugas genitales: prevención, tratamiento y cuidados

Las verrugas genitales son la infección de transmisión sexual (ITS) más frecuente en hombres y mujeres.

Están provocadas por el virus del papiloma humano (VPH). Son benignas, pero algunos tipos pueden inducir cáncer de cérvix o neoplasias intraepiteliales

Este tipo de verrugas aparecen en zonas de contacto íntimo: pubis, zonas inguinales, perineales y perianales, genitales, ano, uretra, vejiga, vagina, cérvix, así como en la boca debido al sexo oral.

Pueden tener diferentes tamaños y formas (de coliflor, aplanadas…).  En pacientes inmunodeprimidos suelen ser más extensas. En niños pueden deberse al autocontagio de otras verrugas, aunque también en ocasiones se relacionan con abusos (habría que valorarlo si se detectan). También pueden transmitirse en el parto

Suelen ser asintomáticas, pero provocan sentimientos de vergüenza, rabia, ansiedad…  en los pacientes y sus parejas, lo que dificulta a veces la consulta y puede afectar a su sexualidad, sus relaciones y su calidad de vida.

PREVENCIÓN

El 75% de las personas sexualmente activas están infectadas y pueden transmitirlas, pero solo el 1% desarrollan lesiones, que pueden aparecer semanas o meses después del contacto.

Las formas de prevenir las verrugas son:

  • Preservativos masculino y femenino protegen de las ITS, pero solo evitan la transmisión del VPH en zonas cubiertas.
  • Vacunas VPH: disminuye el riesgo de contagio (se recomienda informarse).
  • Educación sanitaria, detección y tratamiento.
  • En pacientes afectados:
    • Descartar otras ITS: analítica para comprobar si existe sífilis, Virus de la Inmunodeficiencia Humana (VIH) o hepatitis C (VHC).
    • Valorar posibles lesiones anogenitales internas.
    • Exploración ginecológica completa en mujeres.
    • Revisión de la pareja / contactos sexuales si procede
TRATAMIENTOS

Son diversos. No curan la infección, sino que intentan destruir las verrugas o eliminarlas activando la inmunidad del paciente. Provocan enrojecimiento, irritación, quemaduras… 

  • Aplicados por el paciente: cremas como podofilotoxina, imiquimod, sinecatequinas.
  • Administrados en consulta: crioterapia (nitrógeno líquido), electrocoagulación, ácido tricloroacético, láser, cirugía…
CUIDADOS ENFERMEROS

En relación con las verrugas genitales, la enfermera se encarga de:

  • La administración de tratamientos, valorar su efectividad y proporcionar cuidados ante efectos adversos.
  • Realiza seguimiento y apoyo del paciente en la aplicación de tratamientos domiciliarios.
  • Proporciona educación sanitaria, que incluya la valoración de riesgos y la promoción de sexo seguro (protección, higiene, evitar promiscuidad, no consumo de drogas…)

 

“Ante la sospecha de verrugas genitales, consulta.”

 

Mª Pilar Hernández Orta
Enfermera de Dermatología. Hospital Reina Sofía de Tudela


Fuentes

 

Verrugas en la piel: prevención, tratamiento y cuidados

Verrugas en la piel: prevención, tratamiento y cuidados

Las verrugas son infecciones localizadas en la piel o mucosas causada por el virus del papiloma humano.

Verrugas vulgares

Afectan a la capa superficial de la piel, provocando engrosamiento y aspecto antiestético. Pueden molestar o ser dolorosas en los pies o zonas de roce.

Son muy frecuentes, hay diferentes tipos y la mayoría curan espontáneamente, pero en ocasiones persisten durante años, pueden agrandarse, extenderse o contagiarse a otras personas.

 

¿CÓMO PREVENIRLAS?
  • Lavado de manos. Higiene e hidratación adecuada.
  • Mantener la integridad de la piel, evitando lesiones, heridas y roces continuos.
  • No morderse las uñas, ni arrancarse los padrastros.
  • No andar descalzo.
  • Utilizar antitranspirantes si se tiene exceso de sudoración en los pies/manos.
  • No compartir objetos de higiene personal.
  • Evitar manipularlas, rascarlas, morderlas… porque pueden extenderse.
  • Cubrirlas con esparadrapo.

 

TRATAMIENTOS
verrugas

Crioterapia

  • Oclusión con esparadrapo de tela o cinta adhesiva impermeable: renovarlo cuando se moja o estropea.
  • Antiverrugas con ácido salicílico y ácido láctico. Irritantes, proteger la piel situada alrededor de la verruga con vaselina o esmalte de uñas transparente. No usar en verrugas faciales ni genitales, cuidado en los pies de pacientes diabéticos.
  • Crioterapia con nitrógeno líquido: (aplicada por personal sanitario) puede ser dolorosa, provocar ampollas y cicatrices. Debe tenerse cuidado con las quemaduras.
  • Otros: podofilino, cantaridina, glutaraldehído, bleomicina, nitrato de plata, inmunomoduladores,  retinoides tópicos, terapia fotodinámica, electrocoagulación, cirugía…

 

RESUMEN
  • No todas las lesiones sobreelevadas de la piel son verrugas víricas. Conviene consultar en su centro de salud antes de tratarlas.
  • Los tratamientos no siempre son necesarios y hay que ser prudentes porque el 60% desaparecen espontáneamente sin dejar cicatriz.
  • Hay muchos tratamientos, pero ninguno es eficaz para todos los casos.
  • Los tratamientos pueden prolongarse meses o años. Se requiere paciencia y perseverancia.
  • Existe posibilidad de reaparición tras el tratamiento por quedar queratinocitos infectados.
  • Se debe remojar la verruga en agua tibia y limarla antes de tratarla.

 

 

Mª Pilar Hernández Orta
Enfermera de Dermatología. Hospital Reina Sofía de Tudela


Fuentes:

Maquillaje terapéutico en Enfermería

Maquillaje terapéutico en Enfermería

La visibilidad de las lesiones en la piel por patologías, tratamientos, intervenciones quirúrgicas, traumatismos, quemaduras. etc. puede dar lugar a deterioro de la imagen corporal. 

El profesional de enfermería debe valorar cómo afecta a la persona y a la relación con su entorno, social, laboral, afectivo. Por ello, en el plan de cuidados del paciente incluimos el maquillaje terapéutico para corregir y ocultar esas imperfecciones.

Se realiza Información y educación sanitaria, ofreciendo formación en el Taller de aprendizaje a pacientes interesados, que manifiesten preocupación por su aspecto físico y susceptibles de mejorar con estos cuidados.

TÉCNICA
  • Limpiar e hidratar la piel con productos adecuados al tipo de piel, patología…
  • Corrector del color en las imperfecciones. Aplicarlo con los dedos o esponja, poco a poco hasta conseguir un color gris.
  • Utilizar el color opuesto del círculo cromático:
    •  Amarillo neutraliza el azul (hematomas, varices, ojeras…).
    •  Verde neutraliza el rojo (granos, cicatrices recientes, post-laser, peelings, rosácea, angiomas, psoriasis…).
    •  Coral o beige neutraliza el marrón o cubre zonas despigmentadas (lunares, manchas y cicatrices oscuras, ojeras, vitíligo…).
  • Maquillaje para corregir y unificar el tono.
    • Color adecuado a la piel.
    • Piel grasa (oilfree) / seca (enriquecidos).
    • Textura: Fluidos (lesiones moderadas) / Compactos (cuerpo, imperfecciones severas…)
  • Polvos para fijar, iluminar y realzar el rostro.

Se puede rediseñar y maquillar cejas, labios, placas de alopecia… Conviene valorar las preferencias del paciente, realzando sus potenciales.

Se utilizan productos hipoalergénicos para pieles sensibles, con mayor poder cubriente, resistentes al sudor, al agua y con protección UV.

maquillaje terapéutico

CONCLUSIONES

El maquillaje terapéutico, además de mejorar el aspecto estético de la persona, busca mejorar su calidad de vida, consiguiendo mayor seguridad en sí mismo, paliando el efecto que pueda causar en los demás y aumentando su autoestima.

 

Mª Carmen Martín de Aguilera Moro
Mª Pilar Hernández Orta
Enfermería Dermatológica. Hospital Reina Sofía. Tudela

Fuentes

 

Foto principal: Mª Carmen Martín de Aguilera aplica maquillaje terapéutico a Jan Millastre, presidente de la Asociación de Afectados  por Quemaduras de Cataluña (Kreamics)