La infección urinaria es la proliferación de microorganismos en la vejiga y uretra. La bacteria más común es Escherichia coli que migra desde la zona perianal. Es más frecuente en mujeres (uretra más corta y más cerca del ano que la de los hombres), aunque en hombres puede tener más complicaciones.

Hay circunstancias que favorecen esta infección como la actividad sexual, el embarazo, obstrucción urinaria, disfunción de la vejiga y factores genéticos. Los síntomas característicos son dolor en el bajo vientre, escozor al orinar o disuria, polaquiuria (orinar muchas veces pero poca cantidad), sensación permanente de querer orinar (tenesmo vesical), hematuria (puede haber o no sangre en la orina), orina más turbia y con mal olor,  fiebre y dolor lumbar. Cuando la infección se localiza en la vejiga se denomina cistitis. Es importante evitar que la infección se propague a los riñones.

 

¿Qué hacer si presentamos estos síntomas?

En primer lugar, será necesaria realizar un análisis de orina (sedimento con tira reactiva) en el momento de la consulta y/o cultivo que servirá para identificar la bacteria. Según el resultado, el equipo sanitario prescribirá el tratamiento antibiótico adecuado.

 

Consejos para la prevención
  • Higiene anal y vaginal (en mujeres de delante hacia atrás y con jabones de ph neutro; y en hombres retirar el prepucio hacia atrás para limpieza del glande). Después de ducharse poner atención en el secado de la piel.
  • Beber abundantes líquidos (aproximadamente unos 2 litros).
  • Consumir alimentos ricos en vitamina C para acidificar la orina, como zumo de naranja, arándanos, piña, espárragos…
  • No retrasar la micción (orinar cada 3-4 horas) y vaciar la vejiga por completo.
  • Evitar medicamentos efervescentes y bebidas carbonatadas que favorecen el medio básico de la orina y hace que las bacterias proliferen a mayor velocidad.
  • Si mantienes relaciones sexuales, orinar antes y después.
  • El uso del diafragma, preservativos sin lubricante, espermicidas, compresas…favoreces la infección urinaria.
  • Utilizar ropa de algodón y no ajustada.
  • No permanecer con bañador mojado tras salir del agua.

 

¿Cómo debemos actuar a la hora de recoger la muestra de orina?
  • Limpieza de manos y lavar bien la zona genital.
  • Intentar que al orinar la muestra no toque la piel.
  • Desechar la primera parte de la micción.
  • Recoger las muestras en un recipiente estéril sin tocar el interior de la tapa.

 

¿Cuándo debemos acudir al especialista?
  • Si, tras el tratamiento, los síntomas permanecen durante 48 horas o más: Esto se puede deber a la resistencia de las bacterias o a que se ha seguido de forma incompleta o irregular.
  • Si, además de los síntomas comunes, se padece fiebre o dolor en la parte baja de la espalda.
  • Si las cistitis son frecuentes: Es un error pensar que esta situación es normal. Si las infecciones urinarias se repiten muy pegadas en el tiempo, es necesario acudir a un experto para solucionar el problema.

 

Beatriz Ágreda Lizáldez
Marta Martínez de Goñi Pérez
Enfermeras del Consejo Sanitario

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